De 75 millones de personas en edad y condición de trabajar, solo 9 millones tienen trabajo con condiciones decentes mínimas. 35.3 millones, casi la mitad, tienen trabajo, pero precario. Y 24.6 millones ni trabajo tienen. El semáforo del trabajo está en ROJO, y requiere cambios sustanciales para pasar a verde.
El Semáforo de Trabajo Digno de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza muestra una realidad inaceptable. La economía no puede crecer de manera sostenida si quienes trabajan no ganan lo suficiente y carecen de condiciones mínimas como la afiliación a la seguridad social. La reactivación será más lenta si no hay “mercado interno”.
 
El problema del mundo del trabajo es estructural y sistémico. Llevamos años con un deterioro creciente de las condiciones laborales. Mucho peor que las tendencias globales. Al privilegiar las exportaciones se descuido la estabilidad y sostenibilidad del mercado interno, que no es otra cosa, más que la capacidad de compra e ingreso de la población.

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