Enero 11, 2018
ACADÉMICOS, EMPRESARIOS Y POLÍTICOS COINCIDEN: “ES URGENTE LA NECESIDAD DE UN SALARIO SUFICIENTE EN MÉXICO”
- CDMX, Guadalajara, Villahermosa y San Luis Potosí se unen para llegar a un nuevo pacto social en el que se inicie con un salario suficiente para los trabajadores
- La Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, aliada con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, iniciará la exploración de vías legales para obligar al cumplimiento del mandato constitucional
- Al menos, se tendrían que incrementar a 90 pesos el salario mínimo, para que una persona cubra con su necesidades básicas de sobrevivencia, y éste sólo sería el primer paso.
Ciudad de México a 29 de septiembre de 2016.- El día de hoy concluyó la Conferencia Internacional Estado del Arte del Salario Mínimo, en la que se reunió evidencia suficiente que demuestra la urgencia de establecer un piso mínimo de remuneración que sea digno para los trabajadores en México. Durante la segunda jornada de presentaciones de este evento, se reunieron los sectores académico, empresarial y político para exponer y debatir sobre el panorama mexicano respecto al salario mínimo: las condiciones, los retos, los avances y las posibilidades.
Autoridades coincidieron en la necesidad de mejorar los ingresos de los trabajadores, comenzando por un salario suficiente que, “en principio, debe servir para adquirir la canasta alimentaria”. “La mejor política social es la generación de empleos y la inversión productiva, pero no queremos empresas que generen empleos que no cumplen con un salario mínimo suficiente”, afirmó Enrique Alfaro, alcalde de Guadalajara. Él y el Jefe de Gobierno de CDMX, Miguel Ángel Mancera, son parte de un grupo de autoridades locales que actualmente trabajan por incrementar el monto establecido del salario mínimo en sus ciudades, en las que se busca “llegar a un salario mínimo suficiente, acorde con lo establecido constitucionalmente”, de acuerdo con Mancera.
Gerardo Esquivel, del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República, puntualizó que el salario mínimo tuvo una drástica caída en los 80´s y 90´s y no se ha recuperado desde entonces. Ahora es equiparable únicamente a la cuarta parte de lo que era hace 40 años en cuanto a poder adquisitivo. El salario mínimo está muy por debajo de la línea de pobreza. Para que fuera realmente un salario suficiente para cubrir lo indispensable para una familia, tendría que aumentar en un 146 por ciento. Esquivel señaló que el principal responsable sobre la falta de aumento en el salario mínimo es el Banco de México, quien ha hecho estudios sobre el efecto que tendría sobre la inflación en el país, sin embargo son carentes de cualquier de validez técnica y con fallas en su metodología. La mejor forma de acelerar y mejorar la economía es incrementando el salario, ya que les daría a los mexicanos más capacidad de compra, lo que está vinculado al movimiento del mercado interno.
En voz del sector empresarial, Luis Foncerrada -Director General del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP)- afirmó que “el sector empresarial está absolutamente de acuerdo con incrementar el salario mínimo”, al ser éste uno de los componentes del salario real, es decir, de la capacidad adquisitiva del ingreso. De acuerdo con el doctor en economía, la inflación no es provocada por los salarios, más bien lo que afecta es el tipo de cambio y la deuda pública. Enfatizó que lo importante es alcanzar un salario real suficiente, que no esté afectado por inflación, devaluación y endeudamiento.
Salomón Chertorivski, Secretario de Desarrollo Económico de la CDMX, fue enfático al afirmar que ningún trabajador que labore una jornada completa, debe seguir siendo pobre y que para poder sobrevivir sólo con la canasta básica, debería ganar 5,381 pesos, ya que el aumento de ésta es mucho mayor que el propio salario mínimo.
Con base en las diferentes visiones y experiencias vertidas durante los dos días de evento, se concluye que el salario es un factor de los derechos sociales y un motor para la economía de México, a la vez que es un mandato constitucional al que todas las autoridades están obligadas a garantizar como parte de los derechos humanos: “No es algo optativo o discrecional”, en palabras de Lucila Servitje, de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, quien también expuso que el primer paso es un aumento a 90 pesos como mínimo para que una persona cubra sus necesidades básicas de sobrevivencia.
A partir de esta reunión, la Acción Ciudadana Frente a la Pobreza iniciará la exploración de vías legales para obligar al cumplimiento del mandato constitucional que significa el salario mínimo, un salario mínimo suficiente, y se encontrarán las vías para someter a rendiciones de cuentas a quien viola flagrantemente la constitución, como lo expresa el documento emitido por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).